La temporada que tanto estuviste esperando por fin ha llegado, el verano está aquí, lo que significa que podrás ir corriendo a darte un chapuzón para huir un poco del calor. Si tienes planes de visitar la piscina más cercana este verano, es importante asegurarte de proteger la vista de los productos químicos de la piscina. Por ello hoy conoceremos algunos consejos para cuidar los ojos en la piscina:
1. Evitar el uso de lentillas
¿Eres de los que lleva las lentillas puestas a todas partes? Pero sin duda el lugar a donde debes evitar llevarlas es la piscina. Esto se debe a que no te protegerán los ojos, todo lo contrario pueden ocasionar un problema mayor e incluso puedes terminar perdiéndolos, en su lugar, por ello te recomendamos usar gafas de buceo.
Además el agua de la piscina contiene cloro y bacterias, utilizar lentes de contacto mientras estas en la piscina puede resultar peligroso. Por lo tanto, las lentillas pueden atrapar estos microorganismos, ocasionando irritación e infección en los ojos.
Sin embargo, si quieres seguir manteniendo una visión clara, es posible conseguir unas gafas de natación graduadas que te permiten mantener la visión incluso cuando estás bajo el agua.
2. Enjuagar los ojos con lágrimas artificiales
La exposición prolongada al sol también puede ocasionar un mal momento, debido a que la subida de temperatura y pasar mucho tiempo en el agua pueden generar que los ojos sé irriten. Por lo que es recomendable utilizar lágrimas artificiales una vez se deje de nadar, este consejo útil ayudará a mantener los ojos lubricados y así combatir la sequedad.
3. Mantenerse hidratado
Si piensas ir a nadar, debes asegurarte de beber al menos entre ocho a diez vasos de agua al día. Mantenerse hidratado garantiza que los ojos permanezcan húmedos evitando el enrojecimiento y la irritación. Además, esto ayudará a producir las lágrimas necesarias para repeler las bacterias y los productos químicos nocivos para nuestros ojos.
4. Utilizar gafas de buceo
Siempre hay que llevar gafas en el momento en que ingresamos a la piscina, pero no cualquier par de gafas. Lo más recomendable es que estas sean herméticas y se ajusten bien la cara para que no entre nada de agua en los ojos. Evitar compartirlas con otras personas es lo más recomendable, ya que de lo contrario puede provocar la propagación de gérmenes.
Ahora que ya conoces algunos consejos básicos que te ayudaran a cuidar correctamente tu salud ocular este verano. No olvides que ante cualquier duda puedes contactar con nosotros. En Clínica oftalmológica Luz Clinic estaremos encantados de ayudarte y hacerte algunas sugerencias.